La prensa nacional continúa publicando datos del informe anual sobre la evolución de las SOCIMI españolas emitido por ARMABEX. En esta ocasión es el diario El País quien habla sobre él, y lo titula: “Las sociedades inmobiliarias ya controlan 50.000 millones en activos”. Esta cifra, es una aproximación a partir del valor declarado al solicitar su incorporación a Bolsa, y no tiene en cuenta revalorizaciones posteriores.
2019 fue un año positivo para el sector inmobiliario español, y más en concreto para este vehículo inmobiliario. Fueron 22 SOCIMI las que dieron el salto al parqué, lo que eleva la cifra de cotizadas hasta 90, 83 en el Mercado Alternativo Bursátil español, y 7 en Euronext París.
Aunque las primeras SOCIMI iniciaron su actividad en España en el 2009, su primera normativa no entró hasta el año 2013. Es por tanto remarcable que en tan sólo siete años, España sea el segundo país del mundo que cuenta con más sociedades de este tipo, sólo por detrás de EE. UU., donde se les denomina REITs por sus siglas en inglés “Real Estate Investment Trust”.
La fragmentación es un rasgo característico del mercado español, y es por ello por lo que la consolidación en el sector ya ha empezado. Otros países cuentan con un menor número de SOCIMI, aunque de más valor. Así lo confirma también el País, poniendo como ejemplo la OPA que Vitruvio lanzó sobre Única por un valor de 32,4 millones de euros a mediados del 2019.
Según comenta en la noticia Alberto Segurado, Director del área de Debt Advisory en JLL, la especialización es otra tendencia que avanza imparable. El ejemplo más claro es el de Lar España, que vendió sus activos de oficinas para centrarse únicamente en activos comerciales. No obstante siempre hay excepciones como por ejemplo Merlín, la mayor SOCIMI española en capitalización bursátil, que desafía esta tendencia a la especialización.
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